El Parque Municipal conforma un claro ejemplo de la integración de los antiguos huertos en un jardín para el uso y disfrute de todos los ciudadanos.
Fue inaugurado como parque público en el año 1946, y los recuerdos de la infancia de los ilicitanos pasan por los juegos y paseos por sus caminos entrecruzados y rincones idílicos.
Este parque tuvo su nacimiento a raíz de una cesión del propietario del antiguo huerto D. Nicolás Caro, en el siglo XVII, por el conocido "Vínculo del Dr. Caro", el cual se conserva en los archivos de la Basílica de Santa María. En él cedía todos sus terrenos y posesiones en favor de la Virgen de la Asunción, con lo que pasaron a formar parte del patrimonio del pueblo de Elche. Este jardín es el resultado de la transformación del antiguo Huerto del Colomer, y la integración del Hort de la Madre de Deu y el Hort del Real. Se sitúa al norte del centro histórico y tiene alrededor de unas 1600 palmeras.
Un recorrido por el mismo nos hará partir de su extremo sur, junto a la Oficina de Información y Turismo, cuya construcción está formada por una alegre torre decorada al estilo oriental y acorde con las imágenes que nos ofrecen las vistas colindantes con el exotismo de sus palmeras.
Tras cruzar la zona dedicada a los juegos infantiles, hallamos la puerta principal, frente a la que se levanta una reproducción del antiguo templete modernista que se levantaba en la Glorieta. Junto al templete encontramos la torre del Colomer.
Muy cerca, tras atravesar isletas con frutales propios del lugar, encontramos la Rotonda, escenario teatral al aire libre, cargado del exotismo de las palmeras que lo rodean. Fundamentalmente es en el mes de agosto cuando se desarrolla la mayor actividad teatral, protagonizada principalmente por la Asociación Pobladores de Elche.
Al otro lado, una enorme y blanca esfera alberga el Centro de Visitantes, cuyo edificio es conocido a nivel popular como "el huevo", por su estructura semiesférica y blanca resaltando entre palmeras. Se construyó en el año 1946 con motivo de la Exposición Comarcal que tuvo lugar, coincidiendo con la inauguración del parque. Sobre su cúpula lleva marcadas pequeñas estrellas de aire judío, lo que junto a la jardinería y fuentes colindantes, ofrecen una imagen totalmente evocadora de tierras orientales. Ha sido sede del Museo Arqueológico Municipal, y posteriormente del Museo de la Palma Blanca.
Al norte de extiende el rincón dedicado a la rosaleda, donde estas reinas de la botánica afloran imprimiendo más belleza aún a este parque. Muy cerca tenemos una reproducción de la antigua fuente de la Glorieta, que tras ser retirada de su ubicación original, y pasar un tiempo almacenada en el olvido, por fin encuentra su sitio en este rincón. La forma de sus copas evoca a las palmeras.
Muy cerca, y colgado de las paredes hacia la rambla, se sitúa el Molino del Real, cuyo origen data del siglo XVIII. Es interesante la vista desde el puente del Ferrocarril, o desde el otro margen del río, donde podemos apreciar la sucesión de pilares y arcos de medio punto que lo sostienen. Está atravesado por una acequia que parte desde el pantano de Elche paralela al río, cruzando este jardín por su margen occidental. Actualmente es la sede de la Asociación de Bellas Artes de Elche. Junto a dicho molino se forman unos pequeños estanques habitados por aves palmípedas.
Debido a la importancia del agua para esta tierra, no podemos dejar de lado a las personas que han hecho posible la llegada del agua para regadío, a través de diferentes canales y acequias. Así mismo tenemos monumentos a D. José María Serra, precursor del Plan de Riegos de Levante, o a D. Ernesto Martínez, por su plan de Nuevos Riegos El Progreso. Ambos forman bellos rincones de armonía y tranquilidad, que junto a los ya expuestos, componen el majestuoso y a la vez exótico conjunto del Parque Municipal.
Junto al Parque Municipal, en el Paseo de la Estación, se encuentra el Espai d'Art, una zona de exposición permanente y al aire libre, de esculturas de artistas como Pablo Serrano, Sixto Marco, José Luis Sánchez, Amadeo Gabino y José Díaz Azorín. Quizás la obra más relevante sea la de Homenaje a Joaquín Rodrigo, de Pablo Serrano.
El Paseo de la Estación está coronado por una enorme bandera de España junto a una fuente. Al otro lado encontramos el parque Emilio Villanueva, antiguo Parque Deportivo, donde las antiguas parcelas de cultivo fueron transformadas en pistas polideportivas, con piscinas y zona de skate.
Junto al Palacio de Altamira, por su parte posterior, encontramos el Hort del Xocolater, donde tiene lugar todos los veranos el Festival Internacional de Cine Independiente de Elche.
A su derecha hallamos uno de los accesos al Hort de Baix, jardín paralelo al río, que en las fiestas de agosto se transforma en una sala de fiestas al aire libre y entre palmeras.
Al otro lado de la Avda. del Alcalde Vicente Quiles, se extienden una serie de huertos como el Hort del Real, el Hort de Martí Castany, el Hort de Novet, etc. todos ellos visitables y convertidos en parques públicos que integran el Palmeral de Elche. En ellos encontramos el Parque Infantil de Tráfico, junto al cual hay una serie de estanques con peces, que configuran un paisaje muy peculiar. En las proximidades se encuentra el Hort de la Torre, nombre que toma por estar allí ubicada la Torre de Vaillos.